Sunday, May 06, 2007

TLC y referéndum: hipócritas por todos lados

TLC y referéndum: hipócritas por todos lados

En noviembre del año anterior mencionábamos, desde esta bitácora, la conveniencia de que un asunto de tanto calado y con tanto impacto social como el TLC, fuera decidido por la sociedad en su conjunto (http://ticoblogg.blogspot.com/2006/11/ya-nadie-engaa-nadie.html). ¡Qué bien se impuso la cordura en el tema y el Tribunal Supremo de Elecciones abrió el camino!

La decisión del TSE no solo permite una salida democrática a un debate nacional que en algunos momentos parecía conducir a un enfrentamiento social, sino que además nos retrata, de cuerpo entero, las actitudes hipócritas, demagógicas y oportunistas de grupos y personajes que apoyan y adversan el TLC. En eso no hay diferencias entre, por ejemplo, los hermanos Arias y los dirigentes sindicales de ANEP y el ICE.

Seguro de una mayoría suficientemente amplia en la Asamblea Legislativa, unida por intereses y mantenida a base de cesiones en la agenda, Arias se negó rotundamente a considerar la posibilidad de un referéndum, en el que arriesgaba un triunfo legislativo aparentemente garantizado. No obstante, una vez autorizada la recogida de firmas para el referéndum por el TSE, el Presidente, como una veleta, aprovechó los vientos que corrían y decidió convocar el mismo la consulta popular, ganando tiempo valioso en un plazo que se agota en marzo del próximo año.

Por su parte, los opositores al TLC, se relamieron los bigotes con la autorización del TLC para la recolección de firmas. No solo era un respaldo para la tesis de algunos de los que se oponen, sino que además les garantizaba 10 meses de tiempo para el proceso y el necesario para implementar la convocatoria. Es decir, se jugaban dos cartas, un referéndum que les podía ser favorable, y si no, casi agotar un plazo que podría darles un triunfo de todas maneras.

La jugada del Presidente Arias, les quitó la miel de los labios, el referéndum será en setiembre y si gana el SI, los opositores carecerán de respaldo moral para seguir oponiéndose. De ahí la insidiosa campaña de desprestigio del TSE que han lanzado algunos opositores del TLC, por haber acogido éste, la iniciativa de convocatoria del ejecutivo y el legislativo.

La conclusión a la que uno llega, es que a ninguno de los dos bandos les importa un pepino la opinión del pueblo que dicen representar, lo que les interesa es sacar adelante sus tesis, por cualquier medio.

En setiembre el pueblo hablará y ambos bandos tendrán que acatar la voz del pueblo, aunque este no está exento de equivocarse.

1 comment:

Homo surfus said...

El pueblo no come cuento, por eso va a ganar el SÍ !!
De todas maneras has visto alguna vez perder a Oscar Arias? Desde la escuela viene ganando en cuanta carajada propone!! Que viva la democracia y el TLC, carajo!!