Monday, June 20, 2011

Manda güevo, … y de ganso

Hasta la Sra. Ministra de Trabajo reconoció en estos días, en el programa radial Nuestra Voz, que la fórmula para el cálculo de los mal llamados incrementos salariales era injusta, entre otras cosas porque reconoce la inflación oficial con un semestre de retraso. Dicho en otras palabras, el salario, en términos reales, ha ido perdiendo el poder adquisitivo y según la Ministra, la cartera a su cargo debería tomar medidas para corregir este problema que perjudica, exclusivamente, a los asalariados.

Por ello me llamó la atención la noticia (http://www.nacion.com/2011-06-20/ElPais/Salarios-de-sector-privado-subiran-2-55.aspx) de que el Consejo Nacional de Salarios fijó un “aumento” del 2.55%. Lo inaudito de la noticia no es la pequeña magnitud, sino el hecho de que el gobierno aprobara un incremento menor al que propuso el sector patronal.

Es decir que un gobierno que se llena la boca hablando de la lucha contra la pobreza, de proyectos sociales, de las redes de cuido y no sé cuántos otros cantos de sirena, aprueba un incremento menor al que los que tienen que rascarse la bolsa para pagarlo, estaban dispuestos a cubrir. En esas circunstancias lo que cabe decirle al gobierno es el dicho aquel de “no me ayudes compadre” o aquel otro, “con amigos así, para que quiero enemigos”.

Como se decía en los tiempos en que el suscrito era joven, manda güevo, y … de ganso.