Thursday, May 17, 2007

¡Que jacha!

¡Que jacha!

Habiendo vivido lo que los costarricenses hemos vivido durante los últimos años, se diría que estamos curados de espantos y que no hay nada que nos sorprenda. Craso error; nuestros políticos son capaces de volver a sorprendernos.

Al menos eso fue lo que me ocurrió ayer, al leer una nota de la versión electrónica del semanario El Financiero (http://www.elfinancierocr.com/edactual/economia1099436.html), noticia que difunden el día de hoy otros medios de prensa. La nota señalaba que el Comité Ejecutivo del Partido Unidad Social Cristiana había acordado, de forma unánime, pedirles a su par de Ángeles, Miguel y Rafael, los archifamosos expresidentes de la República, que se reincorporaran al partido y a la actividad política.

No solo eso, sino que además les piden que formen parte del Consejo Político Nacional, encargado de la orientación política, es decir de la política social, de la política económica y, entre otros, de la perspectiva ética del quehacer político del partido.

Me parece que la presunción de inocencia no da para tanto y mucho menos los principios éticos que deben regir a un partido político. Los políticos, como la mujer del Cesar, no solo deben ser honrados, sino parecerlo. El Comité Ejecutivo del PUSC no da una muestra de ética ni de respeto a sus correligionarios ni mucho menos ante la opinión pública. Lo único que demuestran es sumisión y la facilidad con la que doblan la cerviz para servir de alfombra a sus amos.

Solo falta que, para aprovechar su experiencia, les pidan que formen parte del tribunal de ética, o mejor aún, de la tesorería del partido. Como dice nuestro pueblo, ¡Que jacha!

Sunday, May 06, 2007

TLC y referéndum: hipócritas por todos lados

TLC y referéndum: hipócritas por todos lados

En noviembre del año anterior mencionábamos, desde esta bitácora, la conveniencia de que un asunto de tanto calado y con tanto impacto social como el TLC, fuera decidido por la sociedad en su conjunto (http://ticoblogg.blogspot.com/2006/11/ya-nadie-engaa-nadie.html). ¡Qué bien se impuso la cordura en el tema y el Tribunal Supremo de Elecciones abrió el camino!

La decisión del TSE no solo permite una salida democrática a un debate nacional que en algunos momentos parecía conducir a un enfrentamiento social, sino que además nos retrata, de cuerpo entero, las actitudes hipócritas, demagógicas y oportunistas de grupos y personajes que apoyan y adversan el TLC. En eso no hay diferencias entre, por ejemplo, los hermanos Arias y los dirigentes sindicales de ANEP y el ICE.

Seguro de una mayoría suficientemente amplia en la Asamblea Legislativa, unida por intereses y mantenida a base de cesiones en la agenda, Arias se negó rotundamente a considerar la posibilidad de un referéndum, en el que arriesgaba un triunfo legislativo aparentemente garantizado. No obstante, una vez autorizada la recogida de firmas para el referéndum por el TSE, el Presidente, como una veleta, aprovechó los vientos que corrían y decidió convocar el mismo la consulta popular, ganando tiempo valioso en un plazo que se agota en marzo del próximo año.

Por su parte, los opositores al TLC, se relamieron los bigotes con la autorización del TLC para la recolección de firmas. No solo era un respaldo para la tesis de algunos de los que se oponen, sino que además les garantizaba 10 meses de tiempo para el proceso y el necesario para implementar la convocatoria. Es decir, se jugaban dos cartas, un referéndum que les podía ser favorable, y si no, casi agotar un plazo que podría darles un triunfo de todas maneras.

La jugada del Presidente Arias, les quitó la miel de los labios, el referéndum será en setiembre y si gana el SI, los opositores carecerán de respaldo moral para seguir oponiéndose. De ahí la insidiosa campaña de desprestigio del TSE que han lanzado algunos opositores del TLC, por haber acogido éste, la iniciativa de convocatoria del ejecutivo y el legislativo.

La conclusión a la que uno llega, es que a ninguno de los dos bandos les importa un pepino la opinión del pueblo que dicen representar, lo que les interesa es sacar adelante sus tesis, por cualquier medio.

En setiembre el pueblo hablará y ambos bandos tendrán que acatar la voz del pueblo, aunque este no está exento de equivocarse.