Popurrí de semana zángana
Desde el año anterior no escribo nada en el “blog”, asunto que me han reclamado un par de parientes cercanos que forman parte del exiguo número de seguidores de la bitácora. La verdad es que escribo cuando me apetece, generalmente cuando algún titular o acontecimiento me motiva a ello, pero ni la sosa campaña electoral fue razón suficiente.
Transcurrida la campaña, el actual gobierno carece de interés y el próximo merece el beneficio de la duda, es decir, hay que darle los 100 días para empezar a valorar su desempeño. Sin embargo, algunas de las decisiones de la Presidente Electa sobre su futuro gabinete, merecen un comentario.
Algunos nuevos ministros llaman la atención y crean optimismo y expectativa, por ejemplo la designación del Dr. Tijerino en Seguridad. Recuerdo gratamente el paso del Dr. Tijerino por la Fiscalía, en donde realizó una destacada labor, según los análisis periodísticos que se hicieron en ese periodo. Ahora le tocará un hueso con hormigas, pero creo que tiene el carácter y la experiencia para asumir la tarea. Otro nombramiento sorpresivo fue el de Obregón en Cultura, el reconocido músico no tiene ninguna experiencia política, pero al parecer ha sido capaz de sacar adelante proyectos que parecían imposibles, por lo que se merece los 100 días de prueba.
La Ministra Ávila continuará en su puesto, en Salud, y parece recoger el consenso de todo el mundo de que su continuidad es oportuna, a pesar del escándalo que se produjo en su ministerio por las contrataciones de consultorías con la UCR, en donde intervino una pareja cuyos miembros están vinculados a cada una de las partes contratantes. Sigue también Garnier, sin contar con el consenso de la anterior. Puede ser una buena jugada, darle más tiempo al titular para terminar su labor, ya que cuatro años en esa caja de pandora del MEP puede ser insuficiente.
La Sra. Antillón pareciera ser una sabelotodo o, para decirlo en términos elegantes, una enciclopedista, pasó de Cuesta de Moras a Zapote y ahora irá al inocuo Ministerio de Economía. Sus virtudes tendrá, pero para el ciudadano común la que parece ser más evidente es su lealtad incondicional al Presidente Arias. Ser parte de la “cuota” del Presidente pareciera ser la principal razón de su nuevo destino. Otro nombramiento, que provocó alguna polémica, fue el de la titular del nuevo Ministerio del Deporte, en donde el candidato natural parecía Pandolfo, responsable del proyecto del nuevo estadio nacional y de la ley para crear el nuevo ministerio, pero según alguna gente, fue víctima de la cuota, en este caso de la paridad de género que quería la Presidente Electa en su gabinete. La responsable de la nueva cartera también merece los cien días de prueba.
Una designación que personalmente me entusiasma es la de la nueva titular del Ministerio de Ciencia y Tecnología. La Sra. Fonseca viene precedida por un incuestionable éxito de muchos años en la Fundación Omar Dengo y no creo que le hagan falta los 100 días para demostrar su capacidad al frente de un Ministerio al que además, le pasarán la responsabilidad del sector de telecomunicaciones, es decir, pareciera que la intención es convertirlo en un ministerio de primera división.
Por el contrario, la designación de Doryan en el ICE no me gustó. Su labor en la CCSS me parece bastante gris, los problemas esenciales en la Caja siguen vigentes, lo que no habla bien de su labor de los últimos cuatro años, por lo que no parece que quién lo hizo de forma mediocre en un lado, tenga éxito en otra institución tan compleja como el ICE. No le daría los 100 días.
En otro orden de cosas, el tema de las últimas semanas ha sido el escándalo sexual en la iglesia católica y su encubrimiento por parte de la jerarquía, incluido el mismísimo Ratzinger. El asunto es de muy vieja data y ha sido denunciado infinidad de veces. Lo nuevo del asunto es el reconocimiento de los múltiples casos de pederastia en el seno de la iglesia, sin que ese reconocimiento sea acompañado del enjuiciamiento de los responsables y sus encubridores, ni de un esfuerzo para reparar el daño causado a las víctimas. En nuestro país, apenas se ha producido la noticia de un ex cura de origen cubano residente aquí y acusado en Miami, pero no es raro que empiece a destaparse lo que parece ser una epidemia en el clero. Ya veremos.